8 de junio de 2011

El mundo de las pequeñas cosas.

 "El ser humano puede ser maravilloso" ¿Dónde está el mérito? Todo el mundo puede darse cuenta de algo tan grande como la "maravillosidad" de las cosas u seres, ser maravilloso, hacer algo maravilloso implica tal grandeza, un acontecimiento tan magnífico que hasta un ciego y sordomudo podría darse cuenta sin la más mínima dificultad.

¿Pero que casa en nuestro día a día? ¿Valoramos los hechos cotidianos? ¿Las cosas sin un por qué?

Muchas veces hemos oído esa gran frese de: "No valoramos las cosas hasta perderlas" ¿Os habéis, nos hemos parado a analizar nuestro día a día? ¿Sabemos apreciar estos pequeños detalles de la vida? Y lo más importante ¿Influyen en nuestra vida y en las decisiones que tomamos?


Cada persona somos un mundo y valoramos una misma acción de forma diferente según nuestro entender de la vida o como nos allá tratado esta. Acciones tales como pagar un café a alguien, ofrecer un cigarro a alguien, darle dos besos al verlo, preguntar cómo está son cosas que podemos entender como cotidianas y hacerlo cometemos el error de no agradecerlas y no darle la importancia que se merecen, por ello, quiero recordarme, quiero recordarles a todos que:
  •  Esa persona que te paga un café puede simplemente pagar el suyo, que lo hace porque te aprecia.
  • Que aquel que al cogerse un cigarrillo ofrece a los que están con él lo hace por que le da gana que simplemente podía cogerse el suyo, así que, valoricemos esa acción.
  • Tengamos presente que no hace falta dar dos besos a nadie al verlo, que se puede simplemente hacer un gesto pasota con la cabeza indicando a la otra persona que te he visto, pero diciendo.. no vales tanto, para mi, como para hacer que me acerque hasta ti.
  • No podemos olvidar nunca a esa persona que cada día, al estar contigo, te pregunta algo tan simple y que puede tener una respuesta tan compleja como ¿Cómo estás? ¿Qué tal el día?. Lo importante, lo realmente importante aquí no es el hecho de que alguien te lo pregunte, sino qué una persona está dispuesta día tras día a escucharte, a apoyarte y animarte en la rutina de la vida, y sin duda, quien haga eso, te quiere, nos quiere.
 Para terminar solo una última pregunta ¿Quién te quiere más, quien te regala una noche la luna o el que te deja su paraguas cada día lluvioso? Quizás me equivoque, pero todos seríamos más felices, estaríamos mejor acompañados, rodeados realmente de la gente que más nos quiere, de aquella a la que realmente le importamos si nos fijásemos en el día a día en lugar de simplemente vivirlo esperando hechos distintos, cosas inesperadas en nuestras vidas.